UN DIA PERFECTO PARA ESTARSE EN CASA

Hola a todos:

Este fin de semana son de esos que no se olvidan, y no por la caza realizada sino... por el día tan malo que salió.

Las previsiones no se equivocaron mucho, daba lluvia para el fin de semana y... así fue. El sábado nos levantamos rezando para que no estuviese lloviendo y... en un principio así fue, hasta que llegamos a lugar de caza. Había mucha niebla, viento y encima llovía. Estuvimos haciendo tiempo en el coche hasta que paró de llover , justo a las 10:00 de la mañana. La niebla se esfumó y decidimos sacar las escopetas ( íbamos mi padre, mi amigo David y yo), al principio se podía estar, aunque debido al tiempo no pasaba ningún tordo, pero pronto empezó a chispear, no mojaba pero como era continuo... al final caló en nuestras ropas ( menos a David que tenia un chubasquero). Fue entonces cuando apareció un pequeño bando de 4 tordos, pues bien, le tiré al que mas cerca tenia ( por cierto estaba un poco largo) y en dos tiros... lo tumbé. Mientras fui a recogerlo , a unos 50 metros de distancia... pasaron otros dos tordos, fue cuando entre David y mi padre le tiraron uno a cada uno, David falló el primero y cuando fue a tirar el segundo, no había cargado el segundo disparo ( no se sabe por que), y mi padre le tiró al otro, le dio pero no lo suficiente, el tordo se fue planeando hasta unos olivos cercanos pero... no pudimos encontrarlo.

Media hora mas tarde, cuando estábamos a punto de irnos, vimos que se acercaba un estornino, el cual iba un poco alto pero... esperé a que estuviese mas cerca y justo cuando fui a tirarle, el puñetero se desvió hacia la derecha hacia unos pinares pero me dio tiempo a apuntarle y... "pum" cayó seco. En un principio creímos que no le había dado pero... como soy cabezon, me fui a buscarlo , aunque no lo vimos caer, pero estaba convencido de que si le había alcanzado y... así fue, lo encontré en medio del camino patas arriba.

Minutos mas tarde , nos separamos para cubrir mas espacio, fue entonces cuando David escuchó una perdiz cantando, sin avisar a mi padre, nos fuimos en buscar de ella. Los bancales estaban impracticables, pero yendo por el borde, nos fuimos acercando, subimos cuatro o cinco bancales y justo cuando alcanzamos el bancal donde se encontraba, a unos 35 o 40 metros salió la perdiz, solo me dio tiempo a ver entre los olivos una sombra marrón que iba como un rayo, sin pensarlo apunté como pude y cuando vi un pequeño claro entre olivo y olivo, disparé una y dos veces, pero " creo que me dejé los tiros atrás" o "delante", no se ni como apunte ni donde, solo veía olivos y mas olivos. Total con no la tumbé, y como no... el corazón a 100.

Minutos mas tardes, empezó a llover de lo lindo y tuvimos que finalizar la jornada a las 11:30 , una hora y media después, así que fue un día un poco "pof" , con las ganas que teníamos y no pudimos cazar mucho.

En fin, ya habrá otros días mejores. De momento os dejo unas fotos que me hice al llegar a casa, todo chopado, y con mis dos piezas abatidas ( por lo menos, todo lo que pasó fue al suelo ).

Saludos: Jesús